Por Alessia Genoves
Los ingresos tributarios del Gobierno Central de El Salvador registraron un significativo incremento de 15.11% en agosto de 2023 respecto al mismo mes del año previo, al ubicarse en $570.61 millones, revelan estadísticas del Banco Central de Reserva (BCR). No obstante, la deuda pública del país continuó llegó a los $17,842.9 millones, lo que abre la preocupación sobre la sostenibilidad fiscal del país.
Ingresos tributarios con un salto de 15.11%
El informe de Ingresos Totales del Gobierno Central del BCR señala que la recaudación tributaria neta en agosto de 2023 fue de $570.61 millones, lo que implica un crecimiento de 15.11% en relación con los $504.59 millones percibidos en agosto de 2022. De esta manera, los ingresos tributarios retomaron su tendencia ascendente luego de la caída de 2020 por la pandemia. En agosto de 2021 se ubicaron en $520.6 millones, mientras que en agosto de 2019 sumaron $520.6 millones.
El principal tributo que explica este dinamismo es el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que aportó $283.66 millones en agosto de 2023, un 8.6% más que los $257.08 millones recaudados en agosto de 2022. En tanto, la recaudación por impuesto sobre la renta pasó de $194.94 millones en agosto de 2022 a $187.34 millones en agosto de 2023, con un leve aumento de 1.2% inter-anual.
Preocupante incremento de la deuda, sobre todo la externa
Por el lado de la deuda pública, los datos del BCR al segundo trimestre de 2023 evidencian un preocupante incremento, especialmente en su componente externo. La Deuda Interna llegó a $6,836.61 millones en el segundo trimestre de 2023, mientras que la Deuda Externa alcanzó los $11,006.28 millones en el mismo periodo. En consecuencia, la Deuda del Gobierno Central sumó $17,842.9 millones.
Estas cifras implican un fuerte salto respecto al segundo trimestre de 2022, cuando la deuda interna era de $4,425.96 millones, la externa de $9,235.05 millones y el total se situaba en $13,661.01 millones. Ahora, si bien la recaudación tributaria creció sólidamente en agosto de 2023, el acelerado incremento de la deuda pública, especialmente la externa, genera incertidumbre sobre la sostenibilidad fiscal del país en los próximos años.